¡Gracias, gracias, gracias! Por la compañía, por el apoyo y por hacer de un día especial... Un día aún más bonito.
¡Sois maravillosos y una de las más grandes razones, por las que yo esté aquí!
Este Sant Jordi, demostramos que pase lo que pase, somos imparables.
La necesidad de vernos las caras, juntarnos y hacer una Diada "normal", lo superaba todo, !incluso las inclemencias climáticas!
Fue increíble ver como entre granizo y lluvia (en cuanto paraba un poco), la gente salía a pasear, acercándose a los puestos de libros y rosas.
Gracias, gracias a todos de todo corazón, familia, amigos, lectores, conocidos y "antes desconocidos".
Haceís que las ilusiones no se apaguen jamás y siempre desee que llegue el próximo Sant Jordi, para volver a compartir momentos con vosotros.
¡Os quiero!
Si "Borges", no podía imaginar un mundo sin libros...
¡A mi, me es imposible imaginar un mundo sin vosotros!
¡GRACIAS!, a todos los amigos, compañeros, familiares, lectores, conocidos y desconocidos, a los que pudieron y a los que no pudieron pasar, a todos los que estuvisteis conmigo en la distancia, a todos los que están de corazón, a los que pasaron a conocerme, a saludar y a todos los que me hicisteis compañía en un día tan especial e increíble como el de ayer.
Se sentía el amor, se palpaba el cariño, la necesidad de juntarnos, las ganas de vernos, aunque privados de abrazos, se reflejaban las sonrisas en los ojos y aún así agradecidos por salir unas horas de la rutina...
¡Vivir una pizca! No pedimos mucho.
El día del libro, nos unió y nos dejó un poco de esa ansiada libertad, que nos está volviendo a todos un poco locos.
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